#CINEENCUARENTENA: MADAME C.J. WALKER, UNA MUJER HECHA A SÍ MISMA

Basada en el libro "On Her Own Ground: The Life and Times of Madam CJ Walker" de la tataranieta de Walker A'Lelia Bundles, esta miniserie se hace fácil de ver, con sólo 4 capítulos de 50 minutos de duración cada uno, que dejan buen sabor de boca y ganas de descubrir algo más de la historia. 
La serie basada en hechos reales, narra la historia de Madame C.J. Walker, una mujer que a principios del siglo XX quiso perseguir su sueño de montar una industria de productos de belleza capilar para mujeres negras, la Madame C.J. Walker Manufacturing Company, y convertirse en la primera mujer millonaria de Estados Unidos.

Si contextualizamos, en la America de principio del siglo pasado hacía relativamente pocos años que se había abolido la esclavitud (en 1863),  pero en las raíces de la sociedad todavía pervivía un racismo exacerbado con muchas diferencias sociales. A Madame C.J. Walker este hecho junto con sus propias experiencias personales la impulso a seguir adelante y perseguir su sueño, crear un producto de belleza para el pelo específico para mujeres de raza negra y hacerse una mujer rica y notable en la sociedad. Pero no sólo era la riqueza el sueño que perseguía, el reconocimiento y el empoderamiento de la mujer negra son el final más ambicioso que Sarah, Madame C.J. Walker, tenía en mente.

Si partimos de la base de que la belleza para una mujer de principios de siglo era un valor en alza, ya que siendo mujer poco más que ser atractiva, casarse y tener hijos era para lo que se les preparaba en aquella época, podemos decir que una melena cuidada y abundante podía ser la envidia de toda la sociedad femenina. Pero para una mujer negra, que hasta el momento no había sido considerada, la belleza y los productos de belleza específicos para ellas eran una autentica revolución, eran la forma de revindicarse como individuos propios. 
Ellas no se parecían al ideal de belleza de la época, una mujer delgada de raza blanca y de pelo largo, liso y sedoso. Tenían sus propias características y formas de tratar el cabello y eso era lo que revindicaban, una belleza propia, por eso una línea de productos para el pelo consiguió encumbrar a su creadora a lo más alto de la sociedad y que a su vez fuese una gran mecenas para escuelas y colectivos culturales. Y proporcionase trabajo y con ello independencia a muchas mujeres. Madame C.J. Walker dotó de libertad y esperanza a muchas mujeres, las impulsó a estudiar, a trabajar y a montar sus propias empresas, ser sus jefas y dirigir su vida hacía donde ellas querían.

Pese a estar ambientada a principios de siglo XX, la estética general de la serie es moderna, tiene una banda sonora actual compuesta casi en su totalidad por artistas negras de la talla de Queen Latifah, Mamie Smith, Diana Gordon o Sippie Wallace entre otras. Según el supervisor musical Morgan Rhodes, eligió presentar predominantemente a mujeres artistas negras. "Pensé que sería realmente hermoso contar la historia de la señora CJ Walker contada por artistas negras de diferentes generaciones y géneros" contó en una entrevista a la revista Bustle.
Aquí os dejamos un enlace a la lista de reproducción de la banda sonora en Spotify:
https://open.spotify.com/playlist/2n8LIKtsav6ihBJyYA8hQ5

Nacida en una familia de barberos, el destino obligó a Sarah Breedlove, interpretada por la ganadora de un Oscar Octavia Spencer, a ganarse la vida lavando ropa para las clases adineradas. Entonces, aún pobre, se casó con un hombre que la maltrató y abandonó, dejándola sola, con una hija pequeña a la que sacar adelante, Leia (heredera del imperio creado por su madre). Un estado de nervios y estrés le llevó a perder pelo, pero como muchas cosas en la vida, aquel problema fue el detonante de un cambio radical. Convencida de que encontrar un producto para mejorar la calidad del cabello de las mujeres afroamericanas sería su futuro, Sarah movió cielo y tierra para lograrlo. Un segundo matrimonio, un cambio de nombre,  y mucho tesón marcarían los cimientos de una vida vinculada a un negocio que nació desde la pobreza de su creadora. Madame C.J. Walker nunca sucumbió y luchó para que se reconociera su papel de empresaria hasta en los círculos más cerrados.

La serie a menudo rompe con la realidad para dar una perspectiva más íntima de su experiencia. Por ejemplo, en un giro surrealista, Walker imagina su competencia con su rival, Addie Monroe, como una serie de combates de boxeo. 

En resumen podemos decir que es una serie positiva, feminista y embriagada por un espíritu moderno y de superación, que nos descubre una historia real de esta mujer hecha a si misma.