72 KILOS


Hoy os queremos enseñar algo que ha llegado (como muchas cosas estos últimos años), primero a las pantallas y luego en papel. Son las viñetas de Oscar Alonso, más conocido como 72 kilos en Twitter con 194mil seguidores, en Instagram con 879k de followers y en Facebook le gusta a 642.502 personas; además de en su propia web.

 El mismo se presenta y resume su trayectoria así:

   “Óscar Alonso nace en Bilbao en 1983.
     Quiere hacer cine, dibujar
     y tener ideas en 1996.
     Conoce a su futura mujer
     en un autobús en 2001.

     Baja de 92 kilos a 72 kilos en 2008.
     Corre su primera maratón en 2012.
     Tiene su primer hijo en 2016.
     Muere feliz en un futuro todavía desconocido.”
  



Su proyecto empieza, como buen propósito de año nuevo, el 1 de enero del 2008, cuando comienza a dibujar una viñeta al día contando como baja 20 kilos, de los 92 a los 72, convirtiendo los 72 kilos en su sello y más adelante en su marca personal. Al establecerse en los 72 kilos nos siguió contando como se preparaba para su primera maratón en Tokio: 42 km y 195 m.

Amante de la palabra correr, sin el anglicismo runner. Motivando desde la sencillez, con personajes simples en sus viñetas que los convierten en universales. “Monigotes” con gran humanidad que permiten al lector empatizar, verse reflejados ellos mismos en las viñetas, buscando cada uno su motivación del día a día.


Después empezó a colaborar con la revista Runner’s World y después ya vienen las redes sociales, que lo convirtieron en el centro de la motivación anti-postureo.

Mientras Mr. Wonderful populariza en tazas, artículos de escritorio y otros objetos frases motivadoras, Óscar Alonso se auto-motiva a sí mismo con viñetas con matices humorísticos. No es que Mr. Wonderful este mal, solo que es distinto estilo. 72 kilos va definiendo un estilo anti-postureo, cuyas temáticas van evolucionando y diversificandose a la vez que aumenta su repercusión en las redes sociales.



Poco a poco, después de bajar los 20 kilos y de correr la maratón de Tokio, sus viñetas pasan a ironizar además del mundo del “runnig” aspectos más universales: la actual dependencia de las redes sociales, la falta de comunicación, la soledad autoimpuesta, las relaciones sociales y de pareja, el amor… Así los mensajes que Óscar Alonso transmite con sus dibujos pasaron a ser más reflexivos y metafísicos, aspectos más generales de nuestra vida; hasta el punto de que actualmente para quien no conozca su trayectoria 72 kilos es un autor de crítica social a través de viñetas.

Además ha ido incluyendo en su repertorio nuevos temas cotidianos como las relaciones interpersonales, la paternidad, el amor, etc.


Merecen mención aparte aquellas ilustraciones dedicadas a días mundiales ya sea de concienciación o sólo de celebración. Esto refleja y refuerza aun más su implicación social desde el estilo del cómic, siguiendo fiel a su estilo reflexivo desde los dibujos sencillos, los colores alegres muy en línea instagramer y las líneas simples universalistas.


Finalmente sale su primer libro el 21 de marzo de 2019. Las vidas que dibujamos es una selección de sus mejores viñetas y algo de material inédito.


Sencillo, colorido y en un formato fiel a su estilo. Como buena selección tiene que dejar cosas fuera, algunas que nosotros habríamos elegido y otras que preferimos fuera, pero es imposible que abarque todo lo que recoge en sus redes sociales.

Para terminar esta entrada queremos mostraros algo que ha dejado fuera y que nos gusta especialmente: las viñetas que dibuja con su hijo Telmo. Cada mes Telmo y él hacen una viñeta juntos que si que está en las redes sociales, pero que no se recogen en la selección del libro.






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